NUEVA YORK._ El ex policía caucásico (blanco), Nicholas Tartaglione, enfrenta una condena de hasta 400 años en la cárcel después de ser declarado culpable por los asesinatos al estilo ejecución de cuatro migrantes hispanos - Urbano Morales Santiago, los primos hermanos Miguel Sosa Luna y Martín Santos Luna y Héctor Gutiérrez Morales – en abril 2016 en el suburbio Otisville, 70 millas al Norte de Manhattan.
NUEVA
YORK._ El ex policía caucásico, Nicholas
Tartaglione enfrenta cientos de años en la cárcel por los asesinatos de los migrantes
Urbano Morales Santiago, Miguel Sosa Luna y Martín Santos Luna y Héctor Gutiérrez Morales en abril 2016. (Fuente externa).
Tartaglione
será sentenciado el 31 de octubre de este año.
Miguel,
Gutiérrez y Santiago fueron ultimados con un tiro en sus cabezas y Martín
estrangulado.
Los
fiscales federales en la corte de White Plains anunciaron en 2017 que buscarían
la pena de muerte para Tartaglione que se declaró “no culpable” y enfrentó el
juicio de tres semanas en el que el jurado lo declaró responsable por los
cuatro crímenes y dirigir una red de tráfico de drogas.
Una
de las versiones indica que los hispanos asesinados, de origen centroamericano
trabajaban en una propiedad del ex policía y los usaba como mulas para
transportar drogas a diferentes pueblos de la parte alta Norte del estado de
Nueva York y a la ciudad, y luego de acusarlos de darle un “tumbe”, los
ejecutó.
Los
migrantes habían sido reportados como desaparecidos por sus familiares y la
búsqueda encontró sus cadáveres en diciembre 2016.
Los
jurados necesitaron un día y medio de
deliberaciones para encontrar a Tartaglione culpable de todos los cargos de
asesinato, secuestro y conspiración de drogas.
Los
cuerpos fueron recuperados en diciembre de 2016, unos ocho meses después de los
asesinatos.
El
fiscal federal del distrito Sur en Manhattan, Damian Williams dijo en un
comunicado que Tartaglione planeó los asesinatos después de sospechar que una
de las víctimas, Martin Luna, le había robado dinero.
Dijo
que Tartaglione atrajo a Luna para que
se reuniera con él en un bar donde el hispano llevó a su hermano y los sobrinos
que fueron ejecutados.
Tartaglione
llevó el cuerpo de Luna a su rancho de Otisville, y sus cómplices transportaron
amarrados a los otros tres hombres vivos.
“Lo
que ocurrió a continuación solo podría
describirse como puro terror, ya que
Tartaglione torturó a Martin y luego obligó a uno de sus sobrinos a ver cómo lo
estrangulaba con una brida”, dijo el fiscal Williams.
El
comunicado detalla que Tartaglione y dos
asociados luego transportaron a los otros tres hombres a un lugar boscoso
remoto, obligándolos a arrodillarse antes de dispararles a cada uno de ellos en
la parte posterior de la cabeza y enterrarlos a los cuatro en una fosa común.
“Los
actos atroces de Tartaglione representan una traición más amplia, ya que era un
ex oficial de policía que una vez juró proteger a la misma comunidad que
devastó”, dijo el fiscal federal.
“La
condena asegurará que Tartaglione se enfrente a una prisión federal de por vida
por los asesinatos inconcebibles de cuatro hombres”, agrega el comunicado.
En
el juicio, los abogados defensores argumentaron que Tartaglione no tenía nada
que ver con los asesinatos y que el Gobierno lo estaba utilizando como un “chivo
expiatorio conveniente”.
El
abogado defensor del ex policía Bruce Barket dijo que su cliente está muy decepcionado
con el veredicto y planea apelar.
“Como
todo el mundo sabe, un veredicto de culpabilidad es el primer paso para
encontrar a alguien condenado injustamente. Tiene la esperanza de que
eventualmente será reivindicado porque no es culpable”, dijo Barket.
Tartaglione
se jubiló después de servir como oficial de policía en los suburbios de Briarcliff
Manor, Mount Vernon y Yonkers, entre otros distritos de Nueva York.
0 Comentarios